¡Qué bonito titular!: «Los jóvenes ponen en valor la generosidad«. Es mi conclusión tras reflexionar sobre lo mucho que los jovenes de hoy ponen en valor la generosidad y lo bueno que sería que todos fuésemos más conscientes de ello.
Una persona muy cercana a mi dice que le preocupa tanto el mundo que deja a sus hijos como los hijos que deja al mundo y creo que es un enfoque muy acertado porque de lo que dejemos al mundo «depende cómo va a ir ese mundo».
En este caso me refiero a la importancia de los valores que tengan las personas que el día de mañana lideraran la sociedad, las empresas y las familias, y hoy escribo sobre esto porque que no dejo de sorprenderme de la juventud que tenemos, llena de generosidad y de muchos otros valores.
A veces veo que personas de mi generación se lleva las manos a la cabeza cuando buscan matices en las generaciones que vienen, sin embargo en mi contacto con el mundo de los jóvenes, a través de mis conferencias en colegios y sortetodo de mis clases en distintas universidades, no paro de observar lo grandes que son, lo que evoluciona la sociedad en esta época. Quizás solo estemos en el primero de los pasos pero es muy destacable la generosidad que ya cultivan. Muchos son los ejemplos que con frecuencia me encuentro de jóvenes que tienen la inquietud de dedicar un tiempo de sus vidas a ayudar a los demás.
Pienso que el mayor defecto del ser humano es el egoísmo. De ahí vienen todos los grandes males, las guerras, el hambre, la falta de solidaridad, el descuido de la naturaleza y tantas otras cosas as que vivivimos a diario.
Esta nueva generación, está poniendo en valor la generosidad, la generosidad en dar, en compartir y en pensar en los demás mas que en uno mismo.
Los jóvenes de hoy son comprometidos con los menos afortunados, crean ONG´s, desarrollan proyectos humanitarios en países en vias de desarrollo, suben proyectos a plataformas de Crowdfounding, se apoyan unos a otros en sus proyectos solidarios, comparten para crecer, y piensan en los demás cuando planifican su futuro. Esta corriente se está extendiendo de forma real al mundo de la empresa, que ya comprende que solo logrará retener el talento si se les aporta ventajas más allá de sí mismos; como puede ser el compromiso con un bien social, el desarrollo de una cultura corporativa solidaria o fomentar el trabajo en equipo con valores.
Podría seguir profundizando en este tema, pero lo dejo en esta breve reflexión y mi más sincera enhorabuena a todos los jóvenes que están poniendo en valor la generosidad y por tanto la cooperación y el compromiso social.
No solo es fantástico sino también beneficioso. El dar produce tanto bienestar que aumenta la felicidad.
¡MUCHAS GRACIAS!
Comparto enlace a la feria del voluntariado Volunfair donde se pueden encontrar muchas maneras de ayudar a los demás como voluntarios y una plataforma para aportar a otros en sus proyectos de ayuda Ihelp.